Quimeras... {Priv Eden}

*El distrito rojo estaba lleno de energía tóxica para Cain, casi era como una peste que debía soportar si deseaba saber algo de su amigo; una mujer de la agencia en al que ahora trabajaba le había contado un poco de los rumores que había sobre algunos artistas de otras agencias en la ciudad sobre usar aquello de pantalla para negocios más turbios, sentía que los Rednight estaban metidos en ello y esa noche vería a uno de los manejadores  que logró contactar de una de esas agencias, claro que se suponía era una cita social en la que él tendría que sacarle la información que pudiera sin llamar mucho la atención claro, después de todo si había entrado en el mundo del espectáculo era solamente para servir de carnada cosa que por lo visto estaba funcionando.

El encuentro sería en  uno de los antros de la zona y como su ropa clásica sería muy llamativa decidió usar un conjunto más simple de los que su manager le había comprado, unos Jeans envejecidos, cinturón marrón con un buso gris ceñido y chaqueta marrón de cuero, Camelia le acompañaba en su modo astral por lo que no tendría problemas si le requisaban.  

Ropa:

La hora del encuentro sería a las 9 de la noche y tenía la dirección anotada en la tarjeta de presentación que aquél hombre le dio, se sentía algo ansioso, tal vez con ese encuentro estaría un paso más cerca de Ken, se entristeció un poco al pensarlo, cuando le conoció Ken era un chico alegre y puro, él le había regresado las esperanzas en el mundo cuando ya las creía perdidas y ahora ese mismo mundo se lo había arrebatado, jamás dejaba de preguntarse si estaría bien, si llegaría a tiempo hasta él para salvarle como Ken le había salvado tiempo atrás... Esas ideas eran un tormento al igual que la motivación para no desistir en su lucha por encontrarle.

El taxi no le llevó hasta el lugar pero le dejó cerca por lo que siguió su camino a pie, las luces neones y parpadeantes se colaban por la puerta en la que había una fila y dos hombres limitando la entrada, solo debía mostrar la tarjeta para que le permitieran pasar, cuando estuvo cerca escuchó el grito de uno en la fila que  trataba de intimidar al guardia para que le soltara, al parecer había tratado de colarse y ahora reñían entre ellos, Cain no quería problemas antes de la hora, necesitaba esa información y no lo arruinaría por algo tan pequeño, así que espera a que los guardias terminen de apartar al problemático para que le dejen entrar*

Estaba entrando ya la noche demasiado y yo seguía sin un lugar en el que quedarme por el momento, por suerte el distrito rojo siempre estaba lleno de clubs y after-hours muy activos, aunque era obvio que no me conformaría con culquier alcoholico cierrabares, no por favor, yo tenía mucho más estilo que eso.

Me dirigía a uno de los clubs más prestigiosos de la zona, era consciente que no podría entrar sin un previo acompañante, pero a menudo los magnates y la gente famosa se reunía en la puerta para charlar mientras se fumaban un cigarro antes de entrar al local.
Al acercarme a la entrada veo el jaleo con un tipo que había intentado colarse, y aprovecho que los guardias están distraídos alejándolo de la puerta para acercarme con disimulo, como si hiciera entrara allí a diario justo a esa hora.

Para mi suerte de ver a otro chico joven cerca, no parecía peligroso y tenía buena planta, tal vez un nuevo rico... el blanco perfecto...
Miro a los lados y me coloco a su lado como si él me hubiera estado esperando para entrar y cojo su mano.

- Ahí hay mucha gente, no quiero perderme y que mi padre salga de ahí sin mi...

Me hago el típico numerito de adolescente perdido y asustado, poniendo cara de preocupación al chico para que le fuera imposible negarse a ayudarme a pasar. Al verle la cara más detenidamente me quedo un momento mirándole fijo, me sonaba mucho pero no estaba seguro de qué, de dónde había visto antes esa cara, claro que en aquel local era normal encontrarse con caras conocidas.
El problema sería que todo el mundo allí sabría su nombre y no podía inventarmelo...

*Al notar a ese chico a su lado arruga un poco el ceño, ese agarre era algo extraño, que te tentaba y erizaba la piel, ese albino no era humano, eso le quedaba claro al pelinegro. Le mira un momento, no parecía un peligro y si se quería colar o en efecto alguien le esperaba dentro no tendría problemas perdiéndole después*

No creo que pase, en breves nos dejarán entrar, pero dentro va por su cuenta…

*El guardia se vuelve a la puerta para abrirla apenas ve su  tarjeta, y al entrar le suelta lentamente la mano buscando no ofenderle, sentirse así con su toque le era incómodo, un dragón no podía permitirse esas actitudes y menos con un varón, era inapropiado a demás de que nublaban las intenciones por las que Cain estaba en ese lugar, encontrar información de aquel amigo que busca.

Ser una de las estrellas del momento hace que varias personas a su paso se le queden mirando y algunas murmuren con curiosidad, a lo que no presta mucha atención, se concentraba en encontrar al representante que había ido a ver pero una chica le frena en su paso por la pista preguntándole si a caso era Cain de los Vass y al verle bien se emociona más con un chillido diciendo a sus amigos que era Cain de los Vass y que era una suerte a demás de querer el autógrafo e invitarle una copa a lo que él solo sonrió con suavidad negando la copa y dándoles el autógrafo, una de las chicas le pide firmar su pecho por el escote a lo que él considera que es rara pero lo hace*